Es una ayuda práctica para adquirir una forma de vida con más calidad, un sistema de educación para la unión de cuerpo, mente y espíritu. Es el Yoga de el bienestar físico. 

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En nuestras clases trabajamos inicialmente con calentamiento. Se prepara el cuerpo para un buen fluir de la energía, descargamos tensiones y toxinas acumuladas durante el día con respiraciones purificadoras. Por medio de la respiración yoguica, que es profunda, se oxigena la sangre y se reorganiza la energía suelta. Las posturas tienen un efecto a nivel corporal, emocional y energético. El trabajo de cada participante en la clase es individual. Con la práctica constante se incrementa su concentración, confianza en sí mismo, su armonía interior y equilibrio. Al final de la clase hacemos una relajación durante la cual el cuerpo recoge las toxinas liberadas en las posturas para su eliminación . 



Las posturas trabajan sobre el sistema óseo, muscular, órganos vitales, glándulas del sistema endócrino. La sangre oxigenada por medio de la respiración profunda y la postura, es enviada a determinadas partes del cuerpo. Se tonifican y desintoxican los músculos, se exprimen en los estiramientos, renovándolos con una torrente de sangre fresca al relajar. Así trabajan hasta su fibra más interna y adquieren de esta manera flexibilidad, elasticidad  y fortaleza en vez de formarse en paquetes que obstruyen el libre fluir de la energía vital y emocional. 

 

En el mismo grupo puede haber principiantes y avanzados en el trabajo. La diferencia es el trabajo interno, ya una vez familiarizado con la forma de las posturas, la conciencia capta cambios sutiles de energía o estados emocionales. Los aprende a manejar a través de la respiración. Este descubrimiento de "estar más en contacto con su verdadero ser" el practicante lo experimenta con gozo, mayor sensibilidad, estabilidad, paz interior y armonía. 



El Hatha-Yoga que practicamos en "El Manantial" promueve una filosofía de comprensión, compasión, ética y conciencia del crecimiento personal. Nos abre puertas para realizarnos com personas, profesionistas con excelencia y como seres portadores de la Luz viviente. El Hatha-Yoga  es una disciplina, no una religión y puede ser practicado por cualquier persona, independientemente de su credo, raza, sexo o edad. 

 

Nota: Cuidamos mucho la columna vertebral  y respetamos los límites individuales del cuerpo de cada uno.